Un día de furia (Falling Down) es una película sobre la tensión y la frustración que genera en muchas personas la vida moderna en las grandes ciudades. En Los Ángeles, durante una jornada especialmente agobiante a causa del calor y del colapso del tráfico, Bill Foster (Michael Douglas), un ciudadano normal y "desequilibrado" se rebela de manera violenta y destructiva contra todo lo que lo rodea en su camino hacia la casa de su ex-mujer para ir al cumpleaños de su hijita. Se verá envuelto en mucha situaciones "engorrosas". En un establecimiento regentado por un coreano, se verá obligado a cambiar los excesivos precios a limpio batazo. En un McMierda, la liará por que no le sirven el menú del desayuno por tres minutos. Le dispararán unos pandilleros. Un nazi le confundirá con un engendro de los suyos. Un oficial del departamento de policía (Robert Duvall) en su último día de servicio, intentará poner fin a su violencia y agresividad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario