Segundo libro de la colección novela negra del Diario de Noticias y Diario Público. El cadáver de Stanley Kent aparece una noche en un observatorio de las colinas de Hollywood. Todo apunta a que se trata de un asesinato común y la policía de Los Angeles encarga la investigación del caso al detective Harry Bosch. Pero pronto se descubre que el finado trabajaba en el sector clínico y tenía acceso a sustancias radiactivas. Y lo que parecía un simple homicidio se convierte en un asunto de terrorismo. La seguridad nacional está en peligro y el FBI toma cartas en el asunto con la agente Rachel Walling, ex pareja de Harry Bosch. Empieza una carrera contrarreloj para encontrar a los culpables: se tiene la certeza de que estos poseen sustancias peligrosas que pueden utilizar en cualquier momento y causar una masacre de dimensiones bíblicas. Siempre me han gustado los libros policíacos y de espionaje.
Con este libro, son 29 lo que llevo leídos este año, los mismos que el total de 2009. El año pasado llegué a leerme 63 libros. Pero en esos dos años anteriores no había leído ninguno en julio. Este año ya llevo 5 este mes, será porque no estoy andando nada en bici. Pero tengo que leer más en Euskera, sólo leo unos 5 al año.
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