El ocaso del samuray

Seibei Iguchi es un samurái de rango inferior del clan Unasaka, de tan sólo 50 koku de arroz. Un koku pesa aproximadamente 150 gramos. Su mujer murió de tuberculosis y al tener una madre anciana y dos hijas que mantener, él y su familia deben llevar una vida penosa. Al terminar su jornada de trabajo, corre a su casa y se centra en las labores domésticas. Un día Seibei se encuentra a Tomonojo, un amigo de la infancia. Éste le habla de su hermana, Tomoe, y le cuenta que ella ha tenido que divorciarse de su marido, el borrachín Toyotaro, y mudarse a casa de Tomonojo. Al día siguiente Tomoe visita a Seibei y los dos se divierten recordando viejos tiempos. Cuando Seibei la acompaña a casa se encuentran con su ex marido, que está furioso y dispuesto a llevársela con él. El destino quiere que sea Seibei, en lugar de Tomonojo, quien se bata en duelo con Toyotaro. El día del combate, Seibei, con una espada de madera, derrota a Toyotaro, que lucha con una espada de verdad. Tomoe empieza a acudir con frecuencia a casa de Seibei. Las hijas de éste, Kayano e Ito, empiezan a encariñarse con ella, y Tomonojo sugiere a Seibei que se case con ella. Sin embargo Seibei rechaza la propuesta, pues tiene miedo de ser demasiado pobre para ella. Mientras, los hombres del clan ordenan a Seibei que mate a Zenemon Yogo un servidor del clan que no acepta al nuevo señor. Seibei se niega, pero se ve obligado a aceptar. Seibei confiesa a Tomoe que desde que eran niños sueña con casarse con ella. Pero Seibei no sabe que Tomoe ya ha aceptado casarse con otra persona. Vence con dificultades a Zenemon y bajo la luz del crepúsculo, Seibei vuelve a casa, que le está esperando Tomoe. Y ya no sé si comieron perdices o lombrices.